(Por Juan Carlos González Leiva) El demente Juan Carlos Morén Figueroa, quien está condenado a cadena perpetua, sobrevive en un estrecho y sucio calabozo del régimen severísimo de la Cárcel de Boniatico en Santiago de Cuba, sin que las autoridades le brinden ningún tipo de asistencia médica o auxilio social.
El también penado Leonel Casa Díaz comunicó por teléfono con el Consejo de Relatores este 23 de mayo y dijo: Lo mantienen solo, bañado por su propio excremento, sin ropas, colchón ni sábanas y hasta la celda carece de agua.
Agregó casas, para colmo de males recientemente lo operaron de una rodilla y le lisiaron la pierna. A cualquier cerdo en este país lo mantienen mejor que a él.
Juan Carlos Morén Figueroa fue sancionado a cadena perpetua por un delito de asesinato y es natural de Santiago de Cuba.
El Gobierno Cubano mantiene a varios miles de enfermos mentales y discapacitados encerrados en condiciones infrahumanas en su complejo carcelario, el cual rebasa los 300 centros penitenciarios. Entre ellos más de medio centenar de ciegos, a los que les niega la licencia extrapenal.